lunes, 11 de febrero de 2013

Todo pasa por algo...



Soy de esas personas que piensan que un solo acto puede cambiar irremediablemente el curso de las cosas.

Un solo acto, por mínimo que sea, puede cambiar el curso de todo; o al menos esto creo yo.
Ponerte unos zapatos u otros, elegir ir andando o en autobús, decidir si declararte o no… todo puede cambiar la sucesión acontecimientos que sucederán tu vida. Sí, libre albedrío. No tenemos un destino. Todo depende de nosotros.
Obviamente no elegimos tener cáncer, sufrir un infarto… son hechos, acontecimientos que suceden en nuestra vida. De nosotros dependerá que hacer. No debemos aceptar las cosas tal y como son con sumisión, debemos luchar.

Esto no quita que no haya cosas “escritas”. Puede que esté escrito que encuentres el amor al tropezar con alguien en la misma calle. Pero, ¿quién ha decidido ir en esa dirección? Es como una estaca de doble filo.

Y así es como somos dueñ@s de nuestros destinos. Puedes quedarte en tu sofá llorando porque esa persona te ha “destrozado” el corazón, o puedes aceptarlo y seguir con tu vida.

No sabemos lo que nos depará el futuro, así que vive el presente. No hay que amargarse buscando lo que no tenemos, las cosas salen por si solas, aunque a veces cueste creerlo. Si algo no sale como esperas, por algo será. Disfruta la vida porque no sabes lo que puede pasarte, tanto para bien como para mal.

1 comentario:

  1. Si un solo acto, por mínimo que sea, puede cambiar cualquier cosa, antes de publicar algo en tu blog deberías revisarlo un poco, corregir expresiones y añadir algunas comas.

    Por cierto, las estacas no tienen doble filo. Es más, no tienen ningún filo. Espadas en todo caso.


    Esme.

    ResponderEliminar